Curiosamente ha pasado mucho tiempo, y yo no había escrito nada. Esto me sucede por mi inconstancia para las cosas, y el hecho de ser un Acuariano de corazón, hace mi que mi mente y espíritu divague libremente por todos lados... signo de aire. (No crean que soy un insulso que adora la astrología, pero en eso el signo se parece bastante a mí, y nótese es él quién se parece a mí, y no yo a él)
En estos meses, he entendido que la homosexualidad es algo normal que ante todos no lo es. Es curioso porque suena contradictorio, sin embargo, no lo creo así. Me tocó amar a los hombres aunque la opinión pública se espante. Pero es lo que me tocó a mí, y frente a eso no puedo hacer caso omiso. Y creo que por primera vez, me enamoré de alguien que, lamentablemente para ser una primera vez, no me correspondió. Triste, muy triste, pero cierto.
Sin embargo, pese al dolor que se siente, las ganas de no querer seguir, la fuerza que sentimos que flaquea, nos toca seguir. Agradezco lo bien que me sentía mientras estaba viva la ilusión.
Agradezco también el hecho de que me diese cuenta que puedo llegar a sentir cosas que todos llaman amor, y el hecho de que me dieron fuerzas para seguir creyendo. Yo sé en este momento querido lector dirás: ¿ es obvio no?, todos nos enamoramos y amamos... todos podemos hacerlo...
Pues sí, pero yo pensaba que no dada mi inmadurez...
Así que estoy vacante, esperando que el amor golpee a mi puerta...
Aunque cada día estoy más seguro que pese a que me acepto gay, no sé calzar en este submundillo donde el hombre más guapo, es quién gana...
